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BlackRock, las finanzas en ayuda de los pensionistas franceses

Frustrados por las bajas aportaciones a los planes de pensiones individuales en el sistema de pensiones francés, los gigantes financieros confían en que con la reforma del Gobierno de Macron por fin llegue su hora.

por Sylvain Leder, enero de 2020

La planta baja de un lujoso edificio de Nueva York abierto al público está ocupada por una tienda de diseño y un bar, del que se escapa una armoniosa melodía improvisada por un pianista para deleite de una distinguida clientela. Este edificio pertenece a BlackRock. Junto con Vanguard y State Street, esta sociedad forma la banda de los “big three”: los tres gigantes de la gestión de activos. Juntos acumulan alrededor de 15 billones de dólares de capitalización, equivalente al producto interior bruto (PIB) de China, y controlan un bloque de acciones mayoritario en el 90% de las empresas del S&P 500, el primer índice bursátil estadounidense.

Pero el tamaño de los dos acólitos de BlackRock es insignificante frente a este monstruo financiero. Con un volumen de facturación superior a los 12.000 millones de dólares y cerca de 14.000 “colaboradores” en una treintena de países, la sociedad de Laurence D. Fink (...)

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DossierLa reforma de las pensiones en Francia: un ataque a los derechos colectivos

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  • Ni un día de más en el trabajo

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