A pesar de la escasez, los estantes de las tiendas de Caracas están repletos: los comerciantes compensan la falta de variedad de los productos que ofrecen amontonando los mismos productos en metros y metros lineales. Pero las torres de pasta dental de ninguna manera satisfacen a Cecilia Torres, que hace cola desde hace varias horas con la esperanza de conseguir leche o detergente. La mujer ironiza: “Habría que encontrar la piedra filosofal que transformara el dentífrico en leche”.
Para el gobierno, los culpables de esta situación se encuentran entre los comerciantes y los grandes importadores, involucrados en una estrategia similar a la del sector privado chileno contra Salvador Allende a principios de la década de 1970: generar indignación privando a la población de los productos básicos. Por ello, en febrero de 2015, el presidente Nicolás Maduro ordenó la ocupación policial de los treinta y seis establecimientos de la cadena de supermercados (...)