En los ocho años transcurridos desde la llegada de los primeros prisioneros a la cárcel de la ilegal base naval que EEUU mantiene desde 1903 en la bahía de Guantánamo, en Cuba, han pasado por ella 779 hombres de cuarenta nacionalidades, desde adolescentes hasta ancianos. Al iniciar Obama su mandato el 20 de enero de 2009 quedaban 242 prisioneros. Entre sus primeras promesas al llegar a la Casa Blanca, estaba la de cerrar esa prisión en el plazo de un año. Sin embargo, hasta mediados de enero de 2010 sólo habían sido liberados o transferidos a otros países 44 de esos detenidos. Aún se encontraban allí 198 reclusos, 92 de ellos yemeníes, esperando la decisión de las autoridades estadounidenses sobre su futuro, mientras permanecían invisibles la ONU y la llamada comunidad internacional. Al menos 40 de esos prisioneros yemeníes aguardaban su inminente liberación y traslado a Yemen.
Pero el 6 de (...)