¿Qué conocemos del pensamiento de Pierre-Joseph Proudhon doscientos años después de su nacimiento, el 15 de enero de 1809? Una fórmula: “La propiedad es un robo”, pero nada más. La persona que Sainte-Beuve describía como el más grande prosista de su época, o Georges Sorel como el más grande filósofo francés del siglo XIX, sólo encuentra asilo en las librerías libertarias y en las estanterías para eruditos. A diferencia de otros pensadores y escritores de la misma época, como Karl Marx, Augusto Comte, Jules Michelet, Víctor Hugo y Tocqueville, las grandes editoriales lo desdeñan.
Sin embargo, el centenario de su nacimiento no pasó desapercibido en 1909. El presidente de la República, Armand Fallières, fue a Besançon, lugar de nacimiento de Proudhon, para inaugurar una estatua de bronce del “padre del anarquismo”. Los sociólogos de la corriente de Durkheim, los juristas radical-socialistas y numerosos sindicalistas se interesaban en él.
Pero la ola anarco-sindicalista (...)