Tan pronto como fue contratado de forma indefinida por Eiffage Construction en 2012, Amadou Maiga se unió a la sección de la Confederación General del Trabajo (CGT) de su empresa. Conoce bien este sindicato: cuando era un “sin papeles”, este inmigrante maliense hizo huelga bajo su bandera durante catorce meses para obtener el permiso de residencia. A sus 33 años ya ha acumulado más días de huelga que algunos asalariados próximos a la jubilación. Su experiencia impresiona a sus nuevos compañeros. “Cuando le dije a mi compañero que había visto a Bernard Thibault varias veces, me respondió: ‘¿Te estás quedando conmigo o qué? ¿Que tú has visto a Thibault? Yo sí lo vi una vez’. Saqué las fotos y se lo mostré. ¡Mi compañero no sabía que conocía a grandes sindicalistas!”.
Junto con algunos militantes que conoció durante la huelga, Maiga creó una asociación que ha permitido construir una escuela en (...)