La obtención del permiso de residencia a veces puede llevar a quienes en su día fueron trabajadores “sin papeles” a tener que tomar decisiones difíciles. Gracias a la regularización de su situación, Moussa Coulibaly y Moussa Traoré pudieron escapar de los empleos poco cualificados a los que los confinaba su situación administrativa. Accedieron a altos cargos que les obligaron a elegir entre su ascenso profesional o su compromiso sindical.
Basurero en Veolia, agarrado a la parte trasera del camión de la basura ya lloviera o tronara, Traoré no experimentó ninguna evolución entre su contratación, en 1997, y su regularización doce años más tarde. Por miedo a llamar la atención, nunca se inscribía en los programas de formación. Cuando obtuvo la documentación, consiguió –en su tiempo libre– el certificado de aptitud profesional (CAP) de gestión de residuos y limpieza urbana y, además, obtuvo el permiso de conducción tipo B y, más tarde, (...)
