- Yosman Botero Gómez (yosmanbotero.com)
Las revoluciones se parecen menos a las interminables escaleras mecánicas que a las olas que rompen en la orilla. Se forman, avanzan, parecen suspendidas en su movimiento y luego caen antes de volver a levantarse. Las etapas de este movimiento continuo dependen del vigor de las movilizaciones populares, que determinarán el futuro de nuestro continente. Ahora bien, las fuerzas progresistas se ven enfrentadas a diversas tensiones que va a haber que superar. Voy a identificar aquí siete de ellas.
La primera concierne a la democracia, que nuestra familia política concibió durante mucho tiempo como un puente incómodo entre la sociedad actual y el socialismo. La izquierda latinoamericana demostró que esa visión era errónea: la democracia no nos provee sólo de un método sino también del espacio indispensable para la transformación social. Los procesos revolucionarios (...)