La retirada de Libia, en mayo pasado, de la lista estadounidense de Estados que apoyan el terrorismo constituye la más reciente etapa de un largo proceso de reinserción internacional, iniciado en 1999. Las familias de las víctimas de los atentados de Lockerbie (diciembre de 1988), del DC10 de UTA en el vuelo París-Brazzaville (septiembre de 1989) y de la discoteca alemana La Belle (abril de 1986) fueron indemnizadas y en septiembre de 2003, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas votaba el levantamiento de las sanciones internacionales. En diciembre de 2003, el coronel Gadafi anunciaba el fin de su programa de producción de armas de destrucción masiva y la apertura de las instalaciones a la visita de los inspectores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).
El viraje diplomático del “Guía de la Revolución” es pues total, tras su apoyo en todos los frentes a las organizaciones de lucha (...)