He dado orden de que se tomen las medidas necesarias para impedir el uso de armas pesadas contra la población civil” declara el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, el 4 de abril. Unas horas más tarde, en Abiyán, los helicópteros de combate de la ONU y la fuerza francesa Licorne se sumaban a la ofensiva de las tropas de Alassane Dramane Ouattara, contra las del presidente saliente Laurent Gbagbo.
En los pasillos de la organización, en Nueva York, esta decisión suscita una cierta incomodidad. Si bien la resolución (Nº 1975) del Consejo de Seguridad en la que se funda, fue adoptada por unanimidad, el 30 de marzo de 2011, algunos funcionarios manifiestan dudas sobre el poder que tendría el secretario general para dar tal “orden” (que sería de dominio exclusivo del Consejo de Seguridad) y subrayan la ambigüedad de la expresión “medidas necesarias”. Ésta, (...)