La operación Barkhane, iniciada en 2014, acabó oficialmente el 9 de noviembre del pasado año. Sin embargo, en este marzo de 2023, por más que no quede ningún soldado francés en Malí, Francia sigue teniendo cerca de tres mil efectivos en Níger o en Chad, es decir, tantos como hace ocho años… París, que se niega a admitir una derrota, continúa en guerra en el Sahel contra un enemigo de contornos vagos, cómodamente calificado de “terrorista”. Una guerra de duración indefinida que sigue adelante en un marco legal impreciso (y nunca debatido por los parlamentarios), con modos de proceder opacos que Francia incluso busca extender a los países costeros del golfo de Guinea.
Desde ahora, el corazón de lo que, a falta de nombre oficial, algunos llaman Barkhane 2, se encuentra en Niamey, capital de Níger, de donde despegan sus drones y aviones de combate y donde se concentra el grueso (...)