Las cifras de venta del tomate andaluz dan vértigo. Desde 1995, España vende, cada año, fuera de su territorio, alrededor de 900.000 toneladas de tomates frescos, lo que le convierte en el primer exportador de Europa (y el tercero mundial, después de México y Siria). Siguen Holanda (834.000 toneladas en 2007), Turquía (372.000), Marruecos (297.000), Bélgica (203.000), Francia (167.000) e Italia (110.000). La importancia de la producción de tomates en los Países Bajos, completamente en cultivo sin suelo y en invernadero, se debe a tres factores: alta tecnología, calefacción asegurada por el gas extraído en las aguas territoriales nacionales y mano de obra estudiante pagada a la baja.
En 2008, Alemania importó 201.000 toneladas de tomates españoles, Inglaterra 174.000, Francia 152.000, Países Bajos 145.000, Polonia 57.000, Italia 33.000, República Checa 28.000, etcétera. Después de la patata, el tomate es, en efecto, la verdura más consumida en Europa. En 2007, los griegos (...)