¿Y si Wall Street adoptase las reglas financieras islámicas? La pregunta podría asombrar e incluso irritar. Sin embargo, hoy día da la vuelta al mundo. La razón es simple: al proscribir las tasas de interés, esta industria financiera –que en la actualidad supone más de 400.000 millones de dólares– parece mejor preparada para resistir los estragos que ocasionaron las hipotecas subprime y la especulación en los mercados de productos derivados.
En Francia un editorial bastante inesperado de Vincent Beaufils, director de redacción del semanario francés Challenge, abordó de frente esa cuestión. Mientras el Papa Benedicto XVI estaba de visita en Francia, el periodista señalaba que en momentos en que el planeta atravesaba “una crisis financiera que barre a su paso todos los índices de crecimiento, más que releer los textos pontificios hay que leer el Corán”. E insistía: “Si los banqueros ávidos de rentabilidad sobre fondos propios hubieran respetado por poco (...)