“¿Quién se acuerda hoy de los armenios?”, parece que dijo Adolf Hitler tomando como ejemplo ese genocidio perpetrado por los turcos en 1915, que todavía algunos siguen negando. En este sentido, realizar una novela gráfica sobre el tema supone, en cierto modo, un reparación moral muy necesaria. Al menos eso debió pensar Paolo Cossi, quien con más voluntad que pericia recupera la historia de uno de los mayores y más desconocidos genocidios del siglo XX. Quizá por eso hemos de perdonar las evidentes carencias que tiene la obra y centrarnos en el contenido, aunque sí hay que reconocerle al autor una aceptable competencia técnica.
Su novela gráfica se estructura en varios episodios en los que, siguiendo un cierto orden cronológico, descubriremos diversas facetas de lo ocurrido así como a sus protagonistas. Cossi no nos ahorra momentos duros pero tampoco se recrea en ellos y busca sobre todo remover las conciencias. Eso (...)