Durante casi tres milenios, los más grandes matemáticos –entre ellos Hipócrates y Arquímedes– trataron de resolver el problema de la cuadratura del círculo: la construcción de un cuadrado con la misma superficie que un círculo, utilizando para ello solamente una regla y un compás. Hubo que esperar hasta 1883 para que un profesor alemán, Ferdinand von Lindemann (1852-1939), demostrara que era imposible.
A siglos de distancia, otro griego, Alexis Tsipras, y otros dos alemanes, Wolfgang Schäuble y Angela Merkel, se encontraron de nuevo en una situación cuyo reparto de papeles era comparable al anterior en la madrugada del 13 julio de 2015, pero en la que la ley del más fuerte ocupó el lugar de la demostración científica. El Primer Ministro griego quería demostrar que su rechazo a las políticas de austeridad era compatible con la pertenencia de su país a la zona euro. Sus interlocutores, la Canciller y el Ministro de (...)