¿Se conocerá algún día la verdad sobre el asesinato de Thomas Sankara, el 15 de octubre de 1987? Desde la caída de Blaise Compaoré, en octubre de 2014, el tupido velo que pesaba sobre este doloroso acontecimiento de la historia del país se ha levantado. Poco a poco, los testigos, que temían por su vida, han aceptado hablar, a imagen y semejanza de Alouna Traoré, el único superviviente de la matanza en la que Sankara y doce de sus colaboradores fueron acribillados a balazos.
En 2015, el Gobierno de transición autorizó a la Justicia para investigar el caso. El juez del tribunal militar responsable de la instrucción, François Yameogo, imputó a diecisiete personas, entre ellas Compaoré y su jefe del Estado Mayor particular, Gilbert Diendéré. El procedimiento judicial, muy esperado en Burkina Faso, podría celebrarse en 2018.
Aunque se conocen los nombres de los seis miembros del comando que actuaron aquel día, (...)