Tras la buena acogida de Arrugas, el valenciano Paco Roca ha sido capaz de superarse a sí mismo. El invierno del dibujante trata de un episodio tan singular como significativo en la historia del tebeo: la epopeya de la revista Tío Vivo, aventura editorial que protagonizaron, en los años 1950, los dibujantes más importantes de la entonces omnipotente editorial Bruguera: Carlos Conti, Guillermo Cifré, José Escobar, Eugenio Giner y José Peñarroya.
Con la Barcelona de la represión franquista como telón de fondo, esta novela gráfica nos hace entrar en contacto con valores que quizás suenen extraños a los lectores de hoy. Los autores de los llamados tebeos consideraban su trabajo un oficio, y se veían a si mismos como obreros. De ese modo, decidieron emprender una experiencia de autogestión en la que los derechos de autor se reclamaban como herramienta de emancipación frente a la tiranía de los editores, y no (...)
