El 9 de diciembre 2007, la creación del Banco del Sur (BS) fue muy celebrada en America latina. Algunos políticos y comentaristas lo ven como una herramienta de liberación de las tenazas de los organismos financieros internacionales y una llave para la integración y el desarrollo. Para otros, es sólo un instrumento del intervencionismo del presidente Hugo Chávez en el Cono Sur.
Más allá del odio y la critica, ¿qué puede llegar a ser el Banco del Sur? ¿Qué influencia puede tener en la economía y las finanzas de la región?¿Puede funcionar si los países que definen su orientación no tienen un proyecto común de desarrollo regional?
Un banco de desarrollo es necesario para financiar proyectos sin rentabilidad económica inmediata, pero que podrían tenerla en el futuro, o para desarrollar misiones de importancia socio-política. Debe, además, proporcionar asistencia a las regiones más atrasadas. La ayuda se destina también a reducir las fracturas (...)