El acuerdo

¿Son el Estado y las organizaciones criminales estructuras que compiten? No necesariamente, responde Raimondo Catanzaro. Centrándose en la mafia italiana, el politólogo analiza las condiciones específicas en las cuales esta puede ofrecer su protección: “Si quieren reemplazar la autoridad del Estado como garante de los bienes y la seguridad física de las personas, quienes se especializan en dichas actividades deben demostrar que son capaces de ejercer la fuerza de manera más eficaz que sus potenciales competidores”. Pretender proteger a una población determinada requiere disponer de un aparato de coerción reconocido como superior al de sus competidores, comenzando por el Estado. No obstante, agrega inmediatamente Catanzaro, y es esta una de sus principales aportaciones, la Mafia no puede prescindir de una autoridad central. Si debilitara demasiado al Estado y a los rivales criminales imponiendo un monopolio de la violencia en un territorio, la mafia vería desmoronarse su modelo económico: ¿cómo vender (...)