- JERÔME LAGARRIGUE. – Besieged (‘Bajo asedio’), 2020
Para comprender la ola de disturbios que sacudió Francia durante seis noches tras la muerte en Nanterre del joven Nahel Marzouk a manos de un policía es instructivo hacer un recorrido histórico por el Antiguo Régimen y dos fenómenos populares que lo marcaron: la jacquerie y el carnaval. Ambos aportan claves que sugieren que esos disturbios son típicamente franceses: más allá del vandalismo, son el último eslabón de una larga cadena de protestas de las poblaciones sometidas contra los abusos de las autoridades.
Las jacqueries son el nombre, en Francia, de las revueltas campesinas que se desataron periódicamente en Occidente a lo largo de los siglos XVI a XVIII. Consistían en estallidos de violencia colectiva provocados por la hambruna, pero también y sobre todo por la negligencia y los abusos de (...)