A comienzos de 2003 el sindicalismo alemán se precipitó en una crisis sin precedentes que redujo su influencia política y que marcó la ruptura del consenso fundador del sistema social alemán, al cual se adherían tradicionalmente los sindicatos, las patronales y los grandes partidos políticos, tanto el Partido Social Demócrata (SPD) como el Partido Demócrata Cristiano vinculado al movimiento obrero católico. Este consenso se basaba en tres pilares:
el Estado de bienestar establecido por Otto von Bismarck en el siglo XIX y luego consolidado por los gobiernos demócrata-cristianos en los años cincuenta.
la “autonomía colectiva”, un sistema de negociación colectiva en las ramas profesionales establecido a comienzos del siglo XX, cuya autonomía fue plenamente reconocida por el Estado tras la II Guerra Mundial.
el sistema de “codeterminación” en los establecimientos y empresas, que los gobiernos (...)