Fue una buena idea la publicación de Cuadernos de África (Galaxia Gutenberg, 2003) y lo es ahora la de los Cuadernos del Himalaya que esta misma editorial acaba de lanzar al mercado, con un formato algo mayor pero igualmente atractivo y en absoluto pomposo. No estamos para derroches, pero sí queremos tener entre las manos los textos y los dibujos (también algunas imágenes) de un pintor de la talla de Miquel Barceló (Mallorca, 1957).
El libro está dividido en tres apartados: textos, dibujos y fotos (tomadas por el autor) que se complementan perfectamente. El mérito de la escritura de Barceló es su sencillez, su espontaneidad, la frescura de un lenguaje (originalmente escrito en francés) exento de otra coloración que no sea la que el artista capta en los objetos, pues “la mirada nutre la pintura, casi la inflama. Mata. No pasa nada” (página 67).
Compartimos las emociones del pintor en (...)