“Esta es mi venganza: contárselo a usted, que todo el mundo sepa lo que hicieron”. Así se expresaba una víctima de las tácticas de tierra quemada ante Charo Borreguero, mientras recogía su testimonio para la Comisión de la Verdad de Naciones Unidas para El Salvador.
Pero esta novela gráfica no pretende exponer sin más ese informe de indudable importancia. Se centra sobre todo en la experiencia personal de la “Chelita” durante su larga estancia como cooperante en la reconstrucción del país, así como en los recuerdos de quienes vivieron un conflicto bélico cuya brutalidad fue cocinada desde Washington. El resultado nos acerca a una guerra relativamente poco conocida mediante un relato que estremece y apasiona a partes iguales. Y, en última instancia, logra honrar la memoria de las víctimas, y por tanto hacer justicia. Además, se trata de un excelente ejemplo de periodismo hecho mediante el cómic, con un dibujo sencillo (...)