Para sembrar las semillas de la paz, necesitamos semillas. ¡Y también a los agricultores para plantarlas!
La seguridad alimentaria y un sector agrícola saludable pueden desempeñar un papel central en los esfuerzos para prevenir los conflictos y construir la paz.
Hoy en día, la comunidad internacional dedica la mayor parte de sus recursos a intervenciones humanitarias destinadas a salvar la vida de las personas afectadas por las crisis prolongadas. Por desgracia, no se destina lo suficiente a ayudar a estas personas —la mayoría de las cuales vive en zonas rurales— a salvar y reconstruir sus medios de vida para ayudarles a evitar convertirse en refugiados, migrantes ilegales o mendigos en lugar de dedicarse a cuidar de sí mismos y de sus familias.
El pasado 30 de marzo me reuní con el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en la que, sorprendentemente, fué la primera vez que la Organización para la Alimentación y (...)